Panorama electoral 2021

Miguel Andrade Orellana


Nuestro país atraviesa por una etapa aguda: afectado por una dramática crisis económica, con miles de muertos por la acción del COVID-19, saqueado por la corrupción fulminante de pequeños grupos criminales, y con una profunda insatisfacción popular por la trágica situación que vivimos. En medio de esta situación avanzan los preparativos para las elecciones presidenciales y de asambleístas del 7 de febrero del 2021.

Todos los partidos y movimientos políticos se preparan, los de la derecha tradicional para conservar el poder económico y político, y defender el sistema capitalista que les permita acumular más dinero. Los partidos y movimientos políticos democráticos y de izquierda, unirán sus fuerzas para enfrentar a la derecha y transformar la sociedad en beneficio de las mayorías populares.

El panorama electoral no se encuentra claro. En la derecha surgen algunos precandidatos, unos se mantienen y otros se retiran como Jaime Nebot, quien aspiraba a la presidencia por tercera vez, pero se retira del escenario porque tiene más rechazos que adhesiones.

Guillermo Lasso es otro representante de la derecha, es el genuino candidato de su clase social –los banqueros- que tanto nos oprimen. Lasso, está coqueteando a los socialcristianos, después del retiro de Nebot, porque considera que un sector lo puede respaldar.

Otro precandidato de la derecha a la Vicepresidencia, como él mismo se autoproclama, como “socialista del siglo XXI”, era el economista Rafael Correa, quien cuenta con un electorado muy reducido y altos funcionarios en todas las funciones del Estado, incluso en los hospitales. Con seguridad, Correa no podrá alcanzar sus objetivos por las prohibiciones constitucionales que le impiden correr por la Vicepresidencia.

Por otro lado, en el escenario político nacional están los partidos y movimientos democráticos y de izquierda, Pachakutík, Partido Socialista y Unidad Popular, con la adhesión de los movimientos sociales: Frente Popular y CONAIE, quienes proponen formar un frente social y político, con una propuesta política diferente a la del gobierno actual y demás partidos de la derecha.