César Correa

Con la construcción del túnel en el Villonaco en la vía a Catamayo la distancia será de 13 kilómetros menos, lo que no solo significará un importante ahorro en el tiempo del viaje, sino también en una inmensa disminución del consumo de gasolina o diésel, lo que tiene un beneficio económico para los usuarios y otro ecológico, porque tendremos una menor contaminación.

Inicialmente serían algo más de 10.000 vehículos los que transitarían por la carretera, que en conjunto dejarían de consumir combustible para recorrer los 130.000 kilómetros ahorrados (13 km por cada carro). En llantas la ganancia también será significativa para la sociedad.

Si calculamos que por cada vehículo el ahorro en el consumo de combustible será de un dólar por viaje, en el año tendríamos una disminución de USD 3’650.000 en ese gasto. Conforme avance el tiempo el número de usuarios se incrementará y el ahorro será más elevado. Según las proyecciones de la Asociación de Consultores del Sur, que realizó el primer estudio, en el año 2030 el número de vehículos que transiten por esta carretera será de 15.000 diarios, para el año 2040 se pasará de los 20.000 y en el año 2050 se contaría con 30.000. Para este último año, en conjunto se ahorrará 390.000 kilómetros de recorrido y más de diez millones de dólares en el consumo de combustibles (bajo la suposición de que su precio se va a mantener). En total, unos 200 millones de dólares serían los que economizarían los usuarios en los primeros 30 años de uso.

Esta información es lo suficientemente válida para que todas las organizaciones de ecologistas y de transportistas de nuestra provincia y aún del país, se movilicen para exigir que se construya el túnel en la carretera de Loja a Catamayo.

En resumen, contabilizando los egresos de los 30 primeros años los lojanos desembolsaremos el doble si simplemente se hace la ampliación a 4 carriles en lugar de hacer el túnel.