Tarde de café y vino de mesa

Llueve granizo al tragar la saliva.

Esquivamos las balas y los paraísos.

El faisán se convirtió en un piélago.

Un día de sol en la lluvia nos irradia.

Un niño mezcla la plastilina para jugar.

Enciende la radio para bailar a la madrugada.

Se revuelca en la iglesia para acariciar las velas.

Raya las paredes para dibujar la placenta.

Un aroma provoca adicción por la miga.

El panadero prepara la masa para hornear.

Tu trigo seduce al aire y promociona el pan.

Mis neuronas se convierten en hormigas.

Un juego alimenta el tiempo de vivir.

Limpiar la batidora con los dedos y la lengua.

Un diente de león crece camuflado en el prado.

El soplo de tus labios es la brisa de abril.