Moradores de algunos barrios periféricos denuncian que los buses de transporte urbano no están llegando a sus destinos; a decir el Consorcio de Transportistas “Ciudad de Loja”, el pésimo estado de las vías dificulta laborar adecuadamente.

Situación

Marco García, un morador del barrio Virgenpamba, al norte de la ciudad, señaló que desde hace una semana se han visto afectados en el transporte urbano porque las unidades no están llegando al barrio y se quedan en el sector Chinguilanchi.

“Esta situación preocupa debido a que productores deben caminar largas distancias con sus cosechas para llevarlos a los mercados, y los moradores de igual manera para llegar a sus casas”, dijo.

Amelia Reyes, también moradora, acotó que los más perjudicados son los niños y personas de la tercera edad. “Ellos deben caminar, en los actuales momentos, bajo la lluvia —provocando que se enfermen—”, enfatizó.

Vialidad

Los representantes del Consorcio de Transportistas “Ciudad de Loja” conocen esta situación. A decir del administrador Diego Guerrero Ordoñez, la entidad cuentan con las unidades suficientes para prestar el servicio dando cobertura en un 90% a los barrios. La problemática surge por el mal estado de las vías que hay en diferentes sectores y al ser automotores pesados no pueden circular por estas arterias.

Por ejemplo, “al barrio Virgenpamba, toda la semana, no hemos prestado el servicio porque los buses no pueden llegar en vista de que la vía, pasando el sitio de la transferencia de la Empresa Eléctrica, está en pésimas condiciones, patinan las unidades y se destruyen. Solo llegamos hasta cierto lugar donde hay un espacio amplio”, afirmó.

Sin embargo, existen otros sitios como Zalapa, Jipiro Mirador, entre otros, que cuando llueve es imposible circular por el mismo problema (falta de mantenimiento vial), por lo que hizo un llamado a las autoridades de estos barrios para que se unan y pidan al Municipio de Loja, que arreglen estas vías con una motoniveladora y rodillo, sumado a ello, la limpieza de las cunetas para que, en el momento que llueva, el agua no circule por la carretera y la destruya. (I)