El cuy asado un plato típico lojano

Existen varios métodos para la preparación de un cobayo

Este es uno de los platos típicos de Ecuador, en especial en las regiones andinas entre ellas Loja, un plato delicioso, autóctono y nutricional de los pueblos ancestrales.

El cuy

Telma G. Puglla, propietaria de una microempresa de cobayos, expresó que este singular animalito, perteneciente a la especie de mamíferos roedores, mide entre 30 y 40 cm, de patas cortas y carece de cola. Su nombre original es cobayo o cobaya, pero a través de los tiempos se ha ido transformando hasta quedar en el vocablo “cuy”, que todos conocemos.

“En Ecuador, especialmente Loja varias son las parroquias donde se pueden encontrar y degustar a este espécimen. Rurales: Chuquiribamba, Taquil, Santiago y San Lucas; urbana: El Valle”, dijo la emprendedora.

Indicó que el consumo de cuy en nuestro país, particularmente en la Sierra, es muy importante. No hay fiesta de pueblo sin este plato. Es el invitado de honor en cualquier evento. Los indígenas y campesinos crían cuyes en sus cuartos de cocina y actualmente existen granjas dedicadas a la crianza y su producción está destinada al consumo interno, pero desde varios años también se lo utiliza para la exportación, señaló.

Preparación

Martha Josefina Calva, propietaria de un restaurante, mencionó que la preparación de este plato es muy delicado si se desea tener un sabor único.

“Uno de mis secretos es: aliñar los cuyes con los ajos, el comino y la sal. Dejarlos reposar hasta el día siguiente. Para el momento de asar colocar un palo a través del cuy desde la cabeza hasta las patas. Recubrir con achiote y ponerlo sobre carbón haciéndolo girar continuamente hasta que éste se cocine por dentro y por fuera, seguir untando achiote constantemente e ir pinchándolo para que vayan cocinándose homogéneamente y verificar su cocción”, añadió.

Finalmente se sirve con una hoja de lechuga, papas cocinadas bañadas en salsa de maní, ají y ensalada.

Salud

Para la propietaria este animal tiene varios beneficios para la salud, la carne de cuy es un alimento básico en la dieta, ya que su grasa está compuesta por un alto porcentaje de ácidos grasos poliinsaturados, los cuales influyen de forma directa en la prevención de las enfermedades cardiovasculares. Dentro de estos ácidos que posee, se encuentran la familia omega 3 y omega 6, los cuales son elementos que favorecen la destrucción de los ateromas en las personas que padecen enfermedades cardiovasculares, lo que confirma su alto valor nutricional, destacó.

“Su consumo es óptimo para los que deseen ingerir proteínas de alta calidad sin los inconvenientes de la grasa. Es recomendable para los niños desde edades tempranas, hasta las personas de avanzada edad, también para los que quieren perder peso o mantener la figura”, dijo Calva.

Asimismo su degustación puede ayudar a personas que padecen de dislipidemias o problemas del corazón, incluso es beneficioso para aquellos pacientes que padecen de artritis o artrosis, por su alto contenido de colágeno.

Rituales curativos

Comerlo no era la única forma de beneficiarse del cobayo, también está asociado a rituales curativos. Profesionales que practican la medicina ancestral realizan el “cubeo”, ritual que consiste en pasar el animal sobre el cuerpo de una persona enferma con el fin de limpiar las malas energías existentes en el paciente. Además, se cree que cura el mal de ojo y el espanto de los niños recién nacidos.(F).(FJC).


-Lugareños de cantones y parroquias de Loja realizan la crianza de cobayos.

-Existen varios métodos para la preparación de un cobayo

-Rituales curativos con el cuy por profesionales dedicados a la medicina ancestral.

-Existen varias formas para la preparación de cobayos.