Vialidad de las parroquias rurales en pésimas condiciones, según presidentes

Vías que conectan a las parroquias.

La provincia de Loja está conformada por 78 parroquias rurales, cuyo denominador común son las necesidades en el ámbito productivo, saneamiento ambiental y vialidad. Según los presidentes, en el caso de las vías, la mayoría presenta daños, limitando el desarrollo de los pueblos y de los agricultores.

Circunstancias

Edison Armijos Ordóñez, presidente del GAD Parroquial de Manú (Saraguro), mencionó que en su sector, al igual que en el resto de la provincia, las vías están destrozadas. “Contamos con casi 100 kilómetros, de los cuales el 80% tiene inconvenientes y no tenemos el apoyo necesario de la Prefectura y del Municipio”, refirió.

Acotó que las vías, que permiten mayor productividad y conexión con la provincia del Azuay, El Oro y Loja, por ejemplo, el Eje Vial Santa Isabel-Zaruma y Saraguro-Chilla, están destrozados, además, en la carretera principal hacia la parroquia, en ciertos sectores, hay enormes fallas geológicas y el lastrado culminó su vida útil.

El presidente añadió que el deterioro de las arterias viales ocasiona que los sitios turísticos como Cerro de Arcos y la Laguna de Chinchilla, sean poco visitados.

Por su parte, Fabián Elizalde, presidente del GAD Mercadillo (Puyango), expresó que la vialidad de la parroquia es de segundo orden —solo de lastre— y tienen el sueño de, en algún momento, contar con una vía mejorada a nivel de asfalto. “Estamos realizando las gestiones para que en algún momento se tome en cuenta el tramo Mercadillo-Shitoque, que es la arteria principal que une a esta parroquia”, afirmó.

Asimismo, el presidente del GAD Parroquial de Sabanilla, Darwin Rene Duarte, puntualizó que las vías en su pueblo tienen serios inconvenientes, porque el invierno las destruyó, “pero estamos trabajando para mantenerlas expeditas”.

Además, el tramo Celica-Cruzpamba- Y del Muerto, de a poco, empieza a tener fallas porque hay enormes huecos, ante ello, solicita a las autoridades darle mantenimiento.

A decir Franco Farfán Aponte, presidente del GAD Parroquial de Mangahurco, con el apoyo de la Prefectura, hasta ahora su parroquia es accesible, pese a que el año pasado el inverno arruinó parte de los caminos.

Aunque en el tema de la productividad estamos totalmente abandonados, resaltó, en estos momentos la gente está preocupada porque necesitan lluvias, pues lamentablemente se presentó el fenómeno de la sequía. “Es verdad, con la naturaleza nadie puede, solo esperamos que las autoridades tomen cartas en el asunto, puedan visitar y constatar las necesidades que tienen los agricultores”, declaró. (I)