(escrito hace muchos años)
Ayayay, en estos días
que la plata es medio ingrata
nos asoman, mala pata,
muchas deudas, madre mía.
Y la deuda es millonaria,
no es tan sólo “cuatro pelos”
ayayay es un desvelo
con su garra victimaria.
Con los “Global”, por un lado,
con la OXI por el otro,
el gobierno como potro
corre y va medio alocado.
El asunto mis bonitos
es tan claro y mandatorio,
que se paga el dolarito
sin alargues perentorios.
Ayayay, nos han caído
todos ellos de cocacho,
reclamando sin empacho
que se pague lo ofrecido.
Esa plata con tristeza
la miramos que se escapa
que con gusto y entereza
financiaba nuestra papa.
Este golpe bien certero
a la mansa economía
nos remuerde en estos días
y nos pone lastimeros.
Sin embargo, mis cholitos,
si pagamos nos ofrecen
otros préstamos que crecen
con la deuda facilito.
Ayayay, en estos días
que la plata es medio ingrata
nos asoman, mala pata,
muchas deudas, madre mía.
Y la deuda es millonaria,
no es tan sólo “cuatro pelos”
ayayay es un desvelo
con su garra victimaria.