Desde el sábado anterior UNES y la CONAIE, que tienen más de un 80 % de puntos ideológicos de coincidencia, están trabajando juntos, por lo que la mayoría de sus postulados que han permanecido en el campo de las propuestas, pasarán a ser realidades desde el presente año, porque ahora tienen la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional.

La alianza entre UNES y la CONAIE tarde o temprano tenía que producirse y estimo que si bien se ha demorado más de lo que yo esperaba, se ha dado en una trascendental coyuntura, aunque por lo sorpresiva muchos aún no perciben que ha ocurrido un terremoto político, que cambia radicalmente la correlación de fuerzas en el país. La izquierda ostenta una fuerza mayoritaria mientras la derecha queda reducida a una débil minoría.

A partir del sábado anterior el movimiento indígena ha alcanzado un poder político que jamás lo ha tenido desde su aparición en 1990. En adelante nada harán las funciones ejecutiva y legislativa en su contra y nada importante sin su conocimiento. Han luchado por obtener el poder político y lo han conseguido.

El movimiento indígena ha consolidado su control de los territorios en los que se hallan las etnias que lo integran; su influencia en el centro de la Sierra y en el Oriente se ha multiplicado al punto que la mayor parte de la administración pública de esos sectores pasa a ser su responsabilidad.

Cualquier resistencia dentro de las filas de UNES o de la CONAIE se desvanecerá pronto por la contundencia de los hechos, que demostrarán que se tomó la mejor decisión.

Existe la suficiente madurez para que la alianza perdure indefinidamente hasta terminar en una fusión, porque las circunstancias así se lo exigirán dentro de un número prudencial de años, porque solo con su fusión podrán hacer frente a los futuros desafíos, que se presentarán más complejos; si no se llega a la fusión se estancarán y entonces cederán sus espacios a otras fuerzas.

A corto plazo veo que en las elecciones de personeros de los gobiernos seccionales se marchará juntos, UNES presentará sus candidatos en las provincias de la Costa y los indígenas en la Sierra y el Oriente, con las salvedades que indiquen los sondeos de opinión, porque indudablemente en varias circunscripciones se contará con algunos lideratos tan fuertes que garantizarán el éxito en las urnas.