El programa Ojo Crítico, de Diario Crónica, recibió al teniente coronel en servicio pasivo de la Policía Nacional y abogado de profesión, Geovanny Guzmán Cárdenas, quien dio a conocer algunos pormenores de los problemas generados en Ecuador y que han provocado mayor inseguridad.
Comentó que las medidas de seguridad en el país se deben aceptar con madurez y, sobre todo, con responsabilidad, en referencia al regreso de la facultad del porte de armas para defensa personal, siempre y cuando se la ejerza con apego a la ley y reglamentos establecidos en el país. “La persona que tiene los permisos para portar un arma de fuego, no puede ingresar armado a lugares públicos y pasivos como estadios de futbol o discotecas”, señaló, al tiempo de advertir que el código Orgánico Integral Penal (COIP) sanciona el mal uso de una pistola, “incluso por tentativa de asesinato”.
Recordó que la inseguridad en el Ecuador tiene un origen, debido a los acontecimientos registrados desde 2007, fecha en la que el país llegó a ser gobernado por un régimen integrante del denominado Foro de Sao Paulo. “Estamos viviendo las mismas circunstancias que enfrentó Venezuela, Chile; ahora Colombia, Perú y Bolivia”, cuyos gobiernos llegarían a destruir los valores de la sociedad para alinear a ciudadanos a un proyecto político que no sería nacional, sino extranjero. “Aquí no podemos hablar de un proyecto político de Rafael Correa; es un plan internacional con influencia del Partido Socialista Obrero Español, en la Asamblea Constituyente”, recordó.
A decir de nuestro entrevistado, las acciones del correísmo habrían allanado el camino para descreditar y terminar con la institucionalidad del país, a partir de la vigencia de una nueva constitución. “Sacaron la base aérea norteamericana de Manta, quitaron la autonomía a la Fuerzas Armadas y Policía e infiltraron la política, el servicio de Inteligencia pasó a manos del Gobierno; denigró a policías mientras condecoraba a integrantes de Alfaro Vive Carajo (AVEC), dándoles cargos directivos y promoviendo su participación política, firmaron un acuerdo con las pandillas, e incluso ahora son asambleístas, entonces qué podemos esperar”, se preguntó el teniente coronel en servicio pasivo de la Policía Nacional.
Hizo memoria del proyecto que tendrían los grupos de izquierda, denominados Foro de Sao Paulo o Grupo de Puebla. “Ellos tiene un plan que se denomina 20-30, y consiste en generar leyes que den cabida y faciliten corredores para el tráfico de drogas y armas; y es muy evidente desde 2010, cuando fueron tomando fuerza, incluso el radar de Montecristi no han podido reponerlo”, y no hay responsables para tomar acciones y controlar el contrabando; inclusive cuestionó el error del presidente Guillermo Lasso Mendoza en mantener en su Gobierno a varios funcionarios que habrían sido parte del régimen orientado a favorecer la delincuencia. A decir del expolicía y abogado de profesión, las alternativas para salir de la situación conflictiva de Ecuador serían nulas, debido a la falta de condiciones que favorezcan la aprobación de leyes, controles y vigilancia del crimen organizado. “Si el presidente ejecutaba la muerte cruzada, hubiera tenido 6 meses para desbaratar todo ese sistema socialista perverso que dejó el correísmo y hasta pudo gobernar con la constitución de 1998”, recalcó.
Según Guzmán Cárdenas, en Ecuador no habría carteles del crimen organizado ni tampoco de narcotráfico, ya que la estructura de ese tipo de organizaciones sería de dimensiones más grandes. “Ellos tiene una estructura empresarial, donde hay una cabeza, área logística, financiero, comercialización, seguridad, inteligencia empresarial; son muy bien organizados”, por lo que las pandillas locales estarían prestando sus servicios a dichas organizaciones radicadas en otros países o continentes. “Los grandes carteles de la mafia reclutaron a los cabecillas de pandillas y pasaron a ser sus lugares tenientes, por eso no hemos visto un Chapo Guzmán o un Pablo Escobar en nuestro país”. (I)