Terminación unilateral del contrato con Simar, sin concretarse

Trabajos en barrios siguen paralizados desde hace meses.

Han pasado varios años y la obra de asfaltado de algunos barrios de la ciudad de Loja, sigue paralizada; mientras el Municipio de Loja aún no hace efectiva la terminación unilateral del contrario con Simar, moradores sufren las consecuencias.

Circunstancias  

En reunión de concejales, jefes departamentales y el alcalde de Loja, Franco Quezada Montesinos, semanas atrás, abordaron el tema Simar, cuyos trabajos iniciaron en agosto de 2021 y, pese a haber recibido un monto aproximado de USD 9’626.374,18, no entrega la obra. El monto total es de alrededor de USD 14 millones 700 mil. Hay una garantía de USD 4 millones por incumplimiento.

El concejal Adalber Gaona Gahona mencionó que la actual administración ha manifestado que está esperando algunos informes técnicos legales, para tomar una decisión definitiva de la terminación unilateral del contrato.

“Como representantes del pueblo, hemos indicado que —más allá de la finalización del contrato de manera unilateral o por mutuo acuerdo— debe garantizarse la continuación de los trabajos, en función de que es un problema que la gente está sufriendo y reclamando”, dijo.

Agregó que están presionando y haciendo el seguimiento respectivo, para que la administración tome la mejor decisión, tomando en cuenta que se puedan culminar los trabajos, sin dilatar más la problemática.

Por su parte, el edil Santiago Erráez Veintimilla confirmó que, efectivamente, el alcalde indicó que terminaría el contrato unilateralmente, por lo que estaban estudiando todo el proceso para no tener fallas, especialmente legales.

“En estos momentos no existe una relación cortés entre Simar y el Municipio, aunque sí laboral, ya que la autoridad habría agotado todas las instancias; incluso la empresa pidió una nueva oportunidad para el diálogo, pero a la cita no llegaron”, refirió.

Acotó que el Municipio debería ayudar a los barrios, pero que sea ya, porque el tiempo transcurre y no se trabaja, tampoco se da por terminado el contrato y la gente está enfermando por el polvo.

Además, la tubería en sitios donde efectuaron los trabajos estaría rompiéndose e, igualmente, parte del pavimento nuevo —en varios sectores— está agrietado; así pues, existen denuncias de que, en barrios como San Cayetano, el grosor de la capa del pavimento es fina. (I)  

Dato

En los barrios de El Rosal, Las Pitas II, San Cayetano Bajo y San Cayetano Alto, las labores están suspendidas; y, en Cacefca, Isidro Ayora y San Vicente, no se ha realizado labor alguna.