
Hablar de la Independencia de Loja, es remontarse al pasado y recordar su historia. Varios textos recogen lo que fue este acontecimiento, que forma parte del pasado, pero también de su presente. Destacadas personalidades retroceden en el tiempo para revivir esta fecha y a la vez destacar los avances de la “Castellana Ciudad”, en sus 201 años.
Un 18 de noviembre de 1820 el pueblo de Loja se congregó en la histórica Plaza de San Sebastián, para proclamar su Independencia. El movimiento revolucionario popular fue encabezado por Ramón Pinto, José María Peña, Nicolás García, José Picoita y Manuel Zambrano.
José Carlos Arias, historiador y miembro de la Academia Nacional de Historia, dice que un acontecimiento que marca este hecho histórico, es el que constituye el grito de libertad, que fue un 18 de noviembre de 1820.
Y el otro, un documento que suele ignorarse, es el del 17 de febrero de 1822, donde se firma por parte de 88 personajes la Independencia. Estas dos fechas son importantes, refiere.
Constar
En el Achivo Histórico de Loja, consta el acta de Independencia, esta es la clave para la interpretación de lo que significó y significa este acontecimiento. El documento fue donado por una familia lojana, en el año 2000 al Municipio de Loja. En una primera instancia daba a entender que era el escrito de Fundación.
Sin embargo, luego de varios estudios e interpretaciones, se verificó que es el acta de Independencia, refiere José Arias.
Quienes forman parte de la Academia Nacional de Historia, Capítulo Loja, integrado por 9 historiadores de esta urbe, presentaron en 2020, “Nuestro Legado, Camino a la Libertad”, que consta más de 437 páginas, refleja las investigaciones realizadas por estos ilustres personajes.
Raíces
Cesar Alarcón Costa, subdirector de la Academia Nacional de Historia, acota que, para el Ecuador entero, es muy importante el pronunciamiento que se hizo en Loja en 1820, porque se consolida ese espíritu, que inspiró el proceso independentista.
Aunque la firma del documento se hizo posteriormente en 1822, “pero en 1820, significa la libertad, independencia e identidad nacional”.
Transmitir
Estos acontecimientos históricos deben ser conocidos por las nuevas generaciones, por este motivo, desde la academia, dice Alarcón Costa, estamos requiriendo del Ministerio de Educación para que restaure las materias de Historia, Cívica y Ética, porque es un derecho de la juventud conocer las raíces de sus ancestros y próceres. (I).