
El ahorro es fundamental para el futuro; aunque la mayoría de jóvenes considera que este es un paso importante, no encuentra la forma de hacerlo. Profesionales de la localidad vinculados con entidades financieras realizan algunas recomendaciones en torno al tema.
La importancia de inculcar la cultura del ahorro en los jóvenes debe darse desde temprana edad, con el objetivo de llegar a la vejez con ahorros suficientes —que permitan una vida estable—; aunque este tema pasa por desapercibido para universitarios y quienes empiezan su primer empleo.
En nuestro país es habitual relacionar la jubilación con una pensión que se recibe por parte del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS); sin embargo, no es la única opción, hay diversas alternativas para iniciar un ahorro desde temprana edad.
Fomentar
Juan Carlos Freire Ramos, gerente general de la Cooperativa Padre Julián Lorente, en diálogo con Diario Crónica, explicó que es importante que los jóvenes, desde que empiezan su actividad laboral, —de manera planificada— realicen un ahorro a futuro.
Y, más aún cuando en el país, de acuerdo a los últimos datos del INEC, la población “está envejeciendo”, y el número de aportantes al IESS, será menor.
Un ahorro programado debe ser una de las opciones desde que los jóvenes empiezan su etapa laboral.
Práctica
Freire Ramos, además, dijo que el ahorro en dinero puede cubrir cualquier necesidad o eventualidad que pudiera presentarse.
Recomendó a los jóvenes universitarios, empiecen con un ahorro mínimo de USD 10 mensuales. “La disciplina y compromiso personal es la única forma de ir construyendo un patrimonio”, puntualizó.
Realidad
Carlos José Aguilar, lojano, contó que hace cinco años obtuvo su jubilación, y vive con lo que reciben mensualmente, cerca de USD 450.
Dijo que durante toda su vida se dedicó a trabajar. “Desde que era joven, no realice un ahorro adicional; y, en la actualidad, lo que recibo mensualmente me resulta insuficiente”.
A decir de Juan Paúl Muñoz, de 26 años, quien hace poco se graduó en Turismo y labora en un hotel de la urbe lojana; “me parece positivo ahorrar para mi futuro, ojalá pudiera hacerlo luego de algunos años”. (I)