Rosa Beatriz Roa Armijos, agente de la Unidad de Control Operativo de Tránsito (UCOT), y, quien lleva alrededor de 10 años en la institución, relató a Diario Crónica que durante su trabajo hay momentos buenos y difíciles, pero siempre está dispuesta ayudar a la ciudadanía lojana.   

Detalles

Rosa Beatriz, oriunda de la parroquia Quinara, cantón Loja, es la tercera de 5 hermanos. Dijo que a ella siempre le gustó portar un uniforme y servir a la sociedad; por ello, cuando se enteró de que, en Loja, por primera vez, se abría el curso para agentes de tránsito no lo dudo, postuló y fue elegida.

“Durante mi vida profesional —casi 10 años— he podido servir en diferentes lugares que me han asignado, por ejemplo, en el área operativa, administrativa y ahora pertenezco al grupo motorizado de la UCOT”, detalló.

Acotó que ser motorizada es satisfactorio porque siempre le han gustado las motos, “en mi casa tenía una motocicleta propia; y aunque nunca me arriesgué a conducir en la ciudad, sí lo hacía en Quinara”, refirió. Además, indicó que el vehículo le permite acudir con rapidez a una emergencia.

Asimismo, reveló la gratitud que guarda a su compañera Victoria Torres —jefa operativa de tránsito por un cierto periodo—, quien le dio la oportunidad de pertenecer a la unidad, donde lleva 2 años.

La agente añadió sentirse conforme con ser parte del grupo motorizado porque le ayuda a estar fuera de los estereotipos que limitaban a una mujer de poder pertenecer a esta unidad, donde solo había hombres.  

Momentos tristes

Rosa Beatriz mencionó que lo más difícil de su trabajo es encontrarse con personas heridas o fallecidas en siniestros de tránsito; así, lleva grabada, en su mente y corazón, la escena de un lamentable suceso acontecido hace 6 años.

“Llegue junto a mis compañeros a tomar procedimiento en un volcamiento ocurrido en la vía antigua a Catamayo, sector de Tierras Coloradas, allí una niña de 5 años, quien era parte de las víctimas, me agarró fuerte la mano y me dijo que no quería morir y le ayude, lastimosamente a los 15 minutos dio sus últimos suspiros. Fue algo conmovedor y desgarrador para mí”, narró. (I)  

Recuadro

Rosa Roa recibió un reconocimiento por su plena y perseverante muestra de profesionalismo al servicio de la sociedad e institución. 

Dato

Tiene 2 hijos (Justin 18 y Victoria 4 años de edad)

Estudio la primaria en la Escuela Vicente Paz (Quinara) y secundaria en la Unidad Educativa Fiscomisional Daniel Álvarez Burneo.

Su madre María Armijos es un apoyo fundamental.

Estudia la carrera Administración Pública en la Universidad Técnica Particular de Loja.