
El activista político y militante del movimiento Creando Oportunidades (CREO), Vicente Flores Torres, estuvo en el programa Ojo Crítico, de Diario Crónica, para analizar la coyuntura política de la provincia de Loja, en relación a la representatividad de las autoridades designadas por el Gobierno del presidente Guillermo Lasso Mendoza.
Se dijo que los cuestionamientos al Gobierno serían el resultado de las decisiones tomadas por el presidente desde el primer día que asumiera el cargo, ya que muchos de sus colaboradores no serían parte del proceso político que lo llevó a ganar las elecciones. “Es el caso de las ministras de Educación y Salud; casi la mayor parte del gabinete, a excepción de dos o tres ministros que fueron de la línea de CREO”, cuyas acciones serían el origen del descontento de su propia militancia. “En cada provincia los ministros tenían su hoja de ruta y se manejaron bajo sus criterios, ubicando gente que no trabajó nunca por el presidente Lasso Mendoza y eso ahondó el malestar en los militantes, adherentes y grupos que lo apoyaron”.
Comentó que es entendible las concesiones en cuotas de poder con otras fuerzas políticas para generar respaldo en la Asamblea Nacional, donde el actual Gobierno no cuenta con mayoría que viabilice los proyectos de leyes y reformas, sin embargo, en la práctica, la mayoría de asambleístas tendrían posturas conspirativas. “Todas las iniciativas de ley enviadas por el Gobierno han sido rechazadas en la Asamblea por parte de quienes hacen mayoría, como el Partido Social Cristiano, Pachakutik, Izquierda Democrática y Unión por la Esperanza, y eso le ha impedido al presidente tener leyes para cumplir con su plan de trabajo”, y llamó la atención en la vieja práctica dentro del poder legislativo, de quienes estarían trabajando por intereses personales.
Flores Torres recordó que el actual Gobierno enfrenta un proceso de desestabilización permanente desde el primer día de su administración, haciendo uso de varios mecanismos. “Empezaron a criticarlo de ineficiente, amenazarlo con juicios, paros, revocatorias del mandato, y ahora, el juicio político es el cuarto intento para destituirlo”, detalló, al tiempo de agregar que dicho comportamiento legislativo estaría distrayendo del trabajo encomendado por los ecuatorianos. “Lo han puesto ahí para que esté, los dos años que lleva de gobierno, defendiéndose de todos los ataques que vienen de la oposición”, resaltó.
Argumentó que hay delegados de los ministerios en la provincia de Loja, que no estarían cumpliendo con las funciones y responsabilidades en los servicios que deben ofrecer a la ciudadanía. “La persona que está en el MAG no responde a nadie, y hace lo que le da la gana. No coordina con el gobernador, jefes o tenientes políticos y se ha manejado con un listado de sus amigos y familiares para entregar la urea”, dio como ejemplo de la falta de gestión en las entidades del Gobierno central. “Igualmente en el tema de salud. Por eso creo que el Gobierno debe dejarse asesorar por gente que está en el territorio para que conozca la realidad; ya que, en el caso del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) estamos aportando todos los meses y no pueden decir que la cobertura de medicina es del 60%”, refirió.
Resaltó la falta de apoyo al Gobierno de Lasso Mendoza para combatir las mafias al interior de las instituciones públicas. “No hablemos de valentía ni capacidad, sino de falta de apoyo para terminar con las mafias en el sistema de salud; porque siguen vendiendo medicina y haciéndola caducar, para continuar comprando y llevándose los recursos de los ecuatorianos”. Incluso cuestionó la falta de delegados de los ministerios en los medios de comunicación para dar a conocer el trabajo realizado por cada cartera de Estado. “Yo les pregunto, quién les prohíbe hablar, a menos que no hagan nada en el cargo que ejercen”, e hizo hincapié en la falta de presencia en la opinión pública de la gestión del Gobierno actual.
Según el militante del movimiento CREO, la figura del juicio político es cuestionable por la falta de pruebas, pero sobre todo la carencia de legitimidad. “Ya hay voces de varios asambleístas que sostienen que no habría causales para destituir al presidente; la gente se da cuenta que cuando los socialcristianos destituyeron a Bucarán, Mahuad o Gutiérrez no benefició en nada a los ecuatorianos”, reflexionó.
Finalmente, insistió en el incumplimiento de campaña del presidente relacionado a tomar en cuenta, para la administración pública, a quienes habrían sido parte del proceso durante los diez años que buscó el poder. “Ofreció ‘descorreisar’ el país, y eso no le perdona la mayor parte de personas que votó por él”, pero también ponderó que, si sale bien librado del juicio político, debe generar un cambio en la administración pública. “Si se salva, tiene que hacer un cambio rotundo”, sentenció. (I)