¡Alto índice de criminalidad!

Elena Carrión

clariaelena@live.com 

Hoy en día la sociedad se encuentra agitada por un alto índice de criminalidad que se está viviendo en todos los sectores.

En la comisión criminológica está inmerso un problema latente como es la falta de corresponsabilidad del control social informal como familia, escuela, colegio, universidad, medios de comunicación, sociedad… y el control social formal, demostrándose en la actualidad que ambos están fallando.

Urge que el Estado intervenga en forma concatenada con las diferentes instituciones vinculándolas entre sí en pro de la sociedad, implementando proyectos y modelos de prevención y seguridad en forma obligatoria, como actividades laborales, deportivas, sociales, educativas con formación en valores, técnicas en defensa personal, apoyando los diferentes emprendimientos y así poder generar trabajo; otro aspecto necesario es crear institutos educativos estatales con carreras técnicas que vayan en beneficio de la niñez, adolescencia y juventud.

El problema está presente y lo estamos viviendo a diario. Frente a esta cruda realidad surgen algunas interrogantes, entre otras:

Como sociedad, ¿qué se está haciendo frente a tan grave situación?

¿Cómo debe contribuir la sociedad para erradicar la delincuencia común y organizada?

¿Quiénes son los llamados a resolver dicho problema?

¿Qué puede hacer la familia frente a tan peligrosa amenaza?

¿Qué hace la docencia en las escuelas, colegios y universidades para impulsar la enseñanza, formación y educación en valores y así evitar se sigan proliferando redes criminales?

A diario escuchamos en los diferentes medios de comunicación realidades como:

Lo mataron, (sicariato)

Lo quemaron,

Lo asaltaron,

Lo asesinaron,

Le robaron,

Lo secuestraron,

Se encuentra extraviado

La violaron…

Crónica que lamentablemente va en ascendencia.

Con gran preocupación es ver la indiferencia demostrada frente a tan grave realidad social, familiar y estatal.

Mi objetivo con este artículo es llamar a la reflexión de toda la sociedad y encontrar soluciones rápidas y seguras para ir disminuyendo la criminalidad presente en nuestro país; protegiendo así los derechos humanos como a vivir sin miedo y en un ambiente sano, que cuando se camine por las calles estar convencidos que la vida está protegida, garantizada y segura; y sobre todo, evidenciándose el interés gubernamental a favor de la sociedad, aplicando acciones positivas en desmedro de la delincuencia por y para el bien de todos.