La sub y la sobredimensión en tiempo electoral

Diego Lara León

Cuando uno lee un libro o mira una película, siempre es recomendable volver mirar y releer, porque en la segunda vez podemos observar detalles que no vimos antes y que son fundamentales para entender.

Hace pocos días volví a ver una película muy interesante “Cadena de Favores” y como siempre me sucede relacioné el mensaje de esta producción cinematográfica con el entorno empresarial, social y político que me rodea.
Las personas tenemos la tendencia a subdimensionar y en otros casos a sobredimensionar el impacto que tienen nuestras decisiones y acciones.

Una persona puede afectar a toda una familia, a todo su entorno con una acción buena o mala. Recordemos que la palabra afectar es neutra, si la acción es buena la afectación será positiva, si la acción es mala la afectación será negativa.

Mientras más personas están involucradas en mis decisiones mayor será la afectación, graficando podríamos decir que todo lo que hacemos tiene un efecto dominó.

Un gerente puede con una mala decisión enviar al desempleo a muchos trabajadores y cada trabajador tiene una familia detrás, por lo tanto, este gerente provoca una inestabilidad a muchas personas que quizá ni siquiera conoce.
Un médico puede al salvar a una persona, salvar una familia.

Un profesor puede al formar a unos niños, formar a una sociedad, recordemos lo que decía Napoleón, “a un niño debemos empezar a educarlo 20 años antes que nazca, educando a su madre”.

Debemos estar claros que las grandes decisiones que enrumban a una sociedad se toman en el poder político. Por lo tanto, las acciones que tomemos quienes elegimos a las personas que manejarán el poder político tendrán una afectación muy grande en el futuro de la sociedad. Ser apático o decidir abstenerse de elegir a los representantes al poder político es un error, porque estamos subdimensionando el efecto de nuestro desinterés hacia la sociedad.

Quienes han decidido postularse para los diferentes cargos de elección popular deben saber que sus acciones afectarán de manera importante a toda una sociedad, si se equivocan muchas familias se verán afectadas.

Cuidado estimados candidatos subdimensionen la afectación de sus decisiones y cuidado sobredimensionen su poder. El poder también es neutro, no debe ser ni bueno ni malo, no es un fin, es un medio.

Electores y postulantes a ser elegidos, leamos, estudiemos, involucrémonos, dimensionemos el impacto de nuestras decisiones, aunque pensemos que una golondrina no hace verano, recordemos que todos somos una pieza de este dominó llamado sociedad, y en el dominó cada pieza es importante.