El Gran Debate de Protágoras de Abdera

El debate es una confrontación dialógica razonada con argumentación sustentada en datos ciertos, entre dos personas expertas en el tema discutido y moderado por una tercera persona que conoce a profundidad el tema y lo plantea a los expertos. El debate debería dejarnos un aprendizaje en el que existe un bien mayor que constituye llegar a un punto de encuentro entre los participantes, lo que trasciende desde dichas personas hacia otras personas involucradas en los temas tratados, este grupo humano está formado no solo por los testigos presenciales de dicho acto dialógico sino también por los miembros de la sociedad confrontados también por los mismos temas con el objetivo de alcanzar un bien común.

Protágoras de Abdera (480 a. C. – 410 a. C.) filósofo griego, discípulo de Demócrito, sofista que se basa en la relación del hombre que se enfrenta al mundo, el Homo Mensura – El hombre como medida, enuncia que “El hombre es la medida de todas las cosas, de las que son en cuanto que son, de las que no son en cuanto que no son.” Protágoras hizo buen uso de verdades bien argumentadas con el más alto nivel posible, lo que ha sido usado con objetivo mayor, para avanzar en la consolidación de conocimientos, y generar consensos que puedan ser útiles para muchos individuos.

En el Ecuador el recurso del debate como herramienta de consenso se ha convertido en un show mediático, en un despropósito sin utilidad final en la que se develan asuntos que desvirtúan la probidad de los participantes, lo que nos deja mucho que desear, ya que ni si quiera se toman como parte de ello las verdaderas incógnitas de cómo se resolverán los problemas existentes en el país, mediante qué mecanismos, ni quiénes forman parte de sus equipos de trabajo, todo ello es lo básico que debemos conocer.

Un debate bien llevado debe tener como objetivo propiciar el intercambio de opiniones con diferentes puntos de vista con la mayor altura, para obtener consensos útiles a la comunidad, debe resaltar los valores humanos y abstenerse de lo opuesto, con ideas claras los demás sabremos a qué atenernos, no hay duda que el debate es muy significativo cuando es bien usado, lo que permitiría encaminarnos hacia un proceso de avance positivo de largo plazo y ser parte del progreso que abra el camino a mejores días.

Si tomamos el pensamiento de Protágoras y lo aplicamos a nuestros días aun considerándolo desde dos puntos de vista -el hombre como medida- sea individual o el hombre como sociedad, nos lleva a la reflexión de que debemos ser parte de la solución y analizar en que componente de la solución estaremos presentes, que aporte daremos en forma individual para propiciar un cambio o cual es el efecto positivo de nuestro grupo humano que como sociedad puede dar para mejorar las condiciones, a todas luces, esto sí es el gran debate.