La música puede ser cantada en solitario o en grupo, pero amarla como lo hace la maestra Karla Salomé Espinosa Ordóñez cuando esta frente a un escenario son muy pocos, porque disfruta cantarle al público.

Vida

Espinosa Ordóñez es directora del Coro Polifónico del Municipio de Loja y también es vocal por Loja de la Asociación de Directores y Coros del Ecuador.

En entrevista a Diario Crónica contó que viene de una familia de artistas, su padre Fredy Espinosa es músico empírico. Su gusto por la música empezó a los 3 años, escuchando a sus parientes; a los 5, participó en el primer concurso de la canción, donde también formó parte del Coro de la Escuela La Porciúncula y en la parroquia Cristo Rey estaba en el Coro Navideño.
“Los años pasaron y tuve la oportunidad de estudiar en la Universidad Técnica Particular de Loja, en donde postulé para formar parte del Coro Universitario, una vez que ingresé pude participar a nivel nacional e internacional”, dijo.

Ella se graduó en Ingeniería en Sistemas y por un tiempo fue profesora de Computación; luego se dio cuenta que tenía que seguir lo que le gustaba y decidió profesionalizarse; mientras formaba parte del Coro Polifónico de la Municipalidad, estudiaba la carrera de Oboe, algo que no le atrajo, pero tiempo después se abrió la especialidad de Canto Lírico e ingresó en el Conservatorio Superior Salvador Bustamante Celi.

“Tengo dos niños: Amelia de 9 años y Benjamín de 6, quienes también tienen el gusto por la música. Incluso mi esposo Benjamín Ríos es requintista en la Rondalla Municipal. Mi hija mayor estudia violonchelo en el Colegio de Artes Salvador Bustamante Celi”, dijo.

Nervios

Karla Salomé Espinosa Ordóñez expresó que como todo ser humano cuando va a ingresar al escenario siente nervios, pese a llevar un gran tiempo en esta profesión, pero esa sensación es la que los mantiene alertas y estar pendientes de la letra que van a entonar, sin embargo, es lo más bonito del mundo, porque por un momento piensa que es dueña del planeta.

Emprendimiento

La pandemia afectó a todos y a los centros de formación de música. Espinosa Ordóñez en febrero del 2020, fundó el KE Estudio de Canto, donde da clases de canto popular y lírico presenciales u online a niños a partir de los 5 años hasta la gente adulta.
El confinamiento casi provoca el cierre de su emprendimiento, ya que al abrir en febrero, un mes después tuvo que cerrar sus puertas hasta agosto y como recién empezaba no tenía estudiantes; para evitar que se cierre el local, empezó con entrevistas a sus exprofesores de canto, artistas internacionales y maestros.

En octubre del mismo año decidió arriesgarse y dar clases presenciales, lo cual evitó que su proyecto creado con sus ahorros y préstamos quiebre.(I).

-Karla Salomé Espinosa Ordóñez tiene 32 años de edad.