
La imagen de la Virgen de El Cisne arribó a su Santuario Nacional, en medio de una marea de fe y devoción que se desbordó a su encuentro.
Desde tempranas horas de la mañana, los devotos de diferentes partes del país se congregaron para acompañar a la Virgen en su peregrinar, mientras otros arreglaban sus balcones y altares para darle la bienvenida. La espera terminó, cuando este viernes 17 de noviembre, a las 17h00 realizó su arribo en el parque central, en el que autoridades civiles y eclesiales la recibieron.
Al ingresar al Templo se realizó la entrega de la custodia de la Reina Coronada de El Cisne por parte de la Policía Nacional del Ecuador al Obispo de Loja, Mons. Walter Heras; y, seguidamente, inició la solemne eucaristía de bienvenida.
Durante la reflexión, Monseñor mencionó: “que hermoso es cuando alguien querido regresa a su hogar, ya que todos sus hijos esperaban su regreso. Durante su permanencia en Loja, Catamayo y San Pedro de la Bendita, ella acompañó a sus hijos y mediante su presencia avivó sus corazones, les dio de comer mediante el movimiento turístico y religioso, fortaleció su fe y confianza en cada oración, ya que en cada paso encomendamos la protección e intercesión de María Santísima en la Advocación de El Cisne”.
Con motivo de su llegada, además, se celebró en la parroquia, los 429 años de aparición de la Virgen de El Cisne. (I)