Los héroes del emprendimiento

Por: Sandra Beatriz Ludeña J.

         María Yolanda Castillo L.

Personaje: Franco Estuardo Figueroa Castillo

Tipo de emprendimiento: Cultural

Nombre del Emprendimiento: Taller de Estuardo Figueroa

Rama de actividad económica: Pintura y escultura.

Su nombre natural y artístico: Estuardo Figueroa, sencillo en su forma de ser y comunicar, trasluce su don de gentes y aunque es maestro de la plástica lojana, se muestra humilde y descomplicado.

Historia: Tiene una Licenciatura en pintura, Diseño, Cerámica y Decoración por la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) y, Maestría en Filosofía del Arte (País Vasco) en España; otra en Gestión Cultural por la Universidad del Azuay (Cuenca).

El arte pervive en su historia, desde niño rayaba paredes, piso y papeles; tiene vena de artista, por su tío Gilberto Herrera Figueroa, pintor y escultor sacro, sus obras adornan los templos del país.

La vocación de Estuardo vio horizonte al ingresar a la Escuela de Bellas Artes por el año 1979; así halla guía y camaradería en los maestros: Guillermo Herrera Sánchez y Claudio Quinde.

Hizo historia como profesor de Artes Plásticas en la UTPL por 15 años y, de Pintura y Escultura del arte en la Universidad Nacional de Loja (UNL) por más de dos décadas; como Director del CUDIC dejó huella con el Salón Nacional de Pintura Eduardo Kingman, encuentros de músicos, poetas, escritores, grupos de danza. Así, convocaba a artistas, curadores de arte, coleccionistas del mundo en el tradicional Teatro Bolívar. Su directriz dio vida a dos Festivales de la Lira y la Pluma Lojana.

Estuardo recuerda que junto a Salvador Villa, Fabián Figueroa y Marco Montaño, bregando por espacios para exponer, crearon un Salón de Pintura, (escenario de Concursos Nacionales) con auspicio del Municipio de Loja, en la alcaldía de Bolívar Guerrero, pero, el cambio de autoridades descontinuó este Salón.   

Forma de trabajo: Ahora, como responsable de cultura y arte de la UNL., forja “Semanartes” una Semana destinada a: música pintura, teatro, poesía, cine, y danza. Así involucra artistas del mundo, como homenaje a la universidad.  Es un gestor cultural en el propio sentido de gestar, y paralelo a esto, pinta, esculpe, escribe.  Así muestra su libro de poesía “Sinfonía de Palabras”.

En otro tiempo su obra verso sobre paisaje, bodegón y pintura de marinas; en la urbe lojana colocó bustos de su pulso y ojo artístico, como del músico Marcos Ochoa Muñoz en el colegio Daniel Álvarez, Edgar Palacios en el Conservatorio Salvador Bustamante Celi; del Padre Lautaro Loaiza en el Parque de las Flores y, Monseñor Ángel Rogelio Loaiza en el colegio La Dolorosa. Su monumento al General Lauro Guerrero, se erigió en el Redondel del Soldado.  En otra etapa, simplifica formas, en abstracción (entre dibujar y desdibujar); y hace surrealismo de carácter protesta.

En escultura trabaja la estilizada y abstracta. Ha retratado al poeta Horacio Idrobo y al pintor Enrique Tábara, que se enriquecen de sentido y color, con figuras abstractas y señales históricas del personaje.  Así, rinde homenaje a intelectuales. La más importante de sus propuestas es “Alaridos de un transeúnte taciturno”.

Sus conferencias inspiran. Nos representó en la Bienal Mundial de Arte. Admira a Picasso, Da Vinci, Miguel Ángel, Eduardo Kingman y Enrique Tábara.

Sus obras figuran en museos y galerías internacionales, sin contar la inmaterial, pues,  siendo docente, se muestra en las carreras artísticas de sus alumnos.

Usa oleos o acrílico sobre lienzo, acuarelas y otros materiales tangibles e intangibles. Atiza metáforas visuales y, procura asir emociones de su espectador en la simbiosis del arte. Su público trasciende el ámbito nacional, pues tiene acogida sin fronteras. 

Se gesta producción por pedido de clientes, pero también hace creaciones, y dice: “Porque la pintura es una expresión espontánea, creativa, personal”. Presenta exposiciones individuales y colectivas y allí le compran.  Reúne colectivos de interesados en exponer arte y promover el trabajo cultural.

La forma de negocio: Sus precios ponderan formato, materiales y propuesta.  Van desde USD 5.000 en adelante. En el exterior tiene mercado y se cotiza mejor. Críticos de otros países valoran su obra y la integran en antologías de pintura, escultura y poesía. 

Mensaje: “Ser perseverante, dedicar tiempo al arte sin rendirse.  En Loja hay que promover campañas valorativas entre las autoridades locales y entidades educativas; solo así habrá consumidores y una sociedad que aprecie la producción artística local”.

Lo encontramos: En Loja, barrio Jipiro, calles: Luis Valencia y Julio Jaramillo, también en la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Loja. Teléfono: 0982532550.