Wilfrido Antonio Tomín cumple un año más de vida

En el local de su peluquería, “Ernestito” y rodeado de artículos de librería y papelería, se lo encuentra al Sr. Wilfrido Antonio Tomín, ciudadano celicano, que con el transcurrir del tiempo se ha convertido en un personaje muy auténtico por sus pláticas revolucionarias, anécdotas, ocurrencias, “no me consta, pero me contaron”.

El 11 de octubre de 1938, vino a este mundo, acariciado por su querida madre, la Sra. Manuela Tomín (+); la educación primaria la realizó en la escuela Simón Bolívar de su ciudad natal, Celica; luego trabajó vendiendo ropa, zapatos y otros artículos con un señor de Ambato, con quien recorrían ofreciendo sus productos por muchos lugares. Aprendió el oficio de “Peluquero” y cuando tenía 17 años se marchó a la ciudad de Quito, trabajó en la peluquería de un Sr. González y fue la oportunidad para contactarse con ciudadanos que simpatizaban con su ideología liberal, uniéndose a URJE (Unión Revolucionaria de las Juventudes Ecuatorianas), esto le significó, incluso la cárcel, por protestar y participar en manifestaciones en defensa del proletariado. Luego se trasladó a la ciudad de Santo Domingo, trabajó un corto tiempo en peluquería y regresó a Quito; en 1958, se presentó para cumplir con el servicio militar, lo asignaron al Batallón “Marañón” de la Libertada, (Guayas), luego lo mandaron a Chone, (Manabí) y finalmente a Guayaquil, donde fue compañero de conscripción de Jaime Hurtado, su coideario político, Julio Jaramillo (el Ruiseñor de América) y de algunos futbolistas profesionales.

Al terminar el servicio militar, regresó a Quito y a los tiempos retornó a Celica a visitar a su madre, ella se había enterado del fervor revolucionario de su hijo y de los maltratos de que había sido víctima y le pidió que se radicara en Alamor o en Pindal.

En el año 1964 llegó a la ciudad de Alamor, cuando la provincia de Loja y principalmente los cantones de la región sur, sufrían una de las más cruentas sequías que produjo la migración de 164.183 personas, trabajó unos pocos meses de peluquero, pero nuevamente, retornó a Santo Domingo; en 1969, regresó a Alamor a continuar con su peluquería e instalar un gran almacén, vendía: camas, colchones, librería y papelería, y muchos artículos más.

En 1970, contrajo matrimonio con la Srta. Blanca Cuenca, con quien procreó a Ernesto Vladimir, Yadira Alariza y Heiner Fidel Tomín Cuenca. A pocos meses de su matrimonio se produjo el sismo del 9 de diciembre de 1970, su mujer se desmayó de miedo y tuvo que sacarla en hombros al parque central de Alamor.

A más de la librería, se dedicó a la crianza de cerdos, llegaron a pesar hasta 28 arrobas cada uno, pero este negocio terminó cuando le quitaron el agua, entonces su situación económica empeoró.

Don Tomín es conocido principalmente por ofrecer material de lectura al pueblo, su autoformación se debe a la lectura permanente que realiza. Nos cuenta que el periódico venía en avión a Catamayo, en la mañana, de ahí en carro hasta Celica, llegaba a las cinco de la tarde; al siguiente día le traían el paquetito, en acémila hasta Alamor. Dice que fue la primera librería que instaló en Alamor, vendía el Universo, revistas como Vistazo, Estadio, Selecciones, Luz; libros: escolar ecuatoriano, semillitas y otros; periódicos de Loja, La Hora, Ecotel y Diario la Crónica, donde también ha realizado algunas publicaciones.

Recuerda a algunos de sus clientes lectores de periódicos y revistas: Enrique Orellana, Rosario Orellana, Francisco Mena, Vicente Ortega, Tobías Serrano, Emiliano Noriega, José Gómez, Luis García, Ever Sarango y otros. Dice que ahora la juventud no lee, lo que le causa mucha tristeza.

Fue gran deportista, se destacó en fútbol y voleibol, participó en la selección de fútbol de Alamor, jugó con el “Gato” Jaramillo, Wilson Córdova y otros excelentes jugadores de la época, (se ríe), “no teníamos entrenador, ni dinero, las señoritas que eran nuestras madrinas, nos ayudaban con dinero para sufragar algunos gastos”. También jugó con la selección de su cantón (Celica) en Arenillas, era defensa.

Fue tesorero de Liga Deportiva Cantonal Puyango y de la Cámara de Comercio de Alamor. Un 1ro. de mayo, trajeron al famoso cantante Trosky Guerrero.

Entre sus ocurrencias, suele manifestar “dicen que cuando se trabaja con la Blanca, rápidamente uno se hace millonario, pero yo ya trabajo más de 20 años con la Blanca, y sigo pobre”. Blanca era el nombre de su mujer, que en paz descanse.

Hoy que cumple un año más de existencia, le deseamos, muchas felicidades y que continúe con esa energía y derroche de entusiasmo.(I).