La política parte fundamental del ser humano 

Campos Ortega Romero

Es incorrecto pensar que la política nos es ajena, que por más ideales que se tengan solo compete a los que están en el gobierno y que la gente “común y corriente” no puede hacer nada para cambiar las cosas, de tal modo que solo hay que preocuparse por “lo propio”, como si lo que sucediese en la política atañe solo a los políticos. Para aclarar esto, se busca a través de esta reflexión analizar diferentes significados y ámbitos de aquello a lo que se llama política, es una indagación del concepto de política y su interacción con otras actividades en las que el hombre se circunscribe, ubicada en el área de la filosofía política, ámbito de las ideologías como valoraciones de las ideas políticas y la reflexión de sus consecuencias en los grupos sociales.

Con este escenario político florecen los viejos y nuevos candidatos de la politiquería para la próxima lid electoral, para elegir: prefecto, viceprefecto, alcaldes, concejales urbanos y rurales, vocales de juntas parroquiales e integrantes del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs). Asoman precandidatos de todas las tendencias y con ofertas a granel para todo el pueblo, reflexionamos que la politiquería no tiene nada que ver con los intereses generales. El fin es la ganancia personal por la vía de producir una apariencia de respetabilidad tras la que se esconden pasiones descontroladas. La voracidad por el poder, o la envidia, el rencor y los celos, son los móviles verdaderos de ella. De ahí nacen la intriga, la traición, la retórica vacía, la falta de lucidez. Finalmente, el desgobierno. Pero lo paradójico es que la politiquería, al socavar la política no hace más que devastar el único escenario donde ésta puede ejercerse. La descomposición moral y política de un régimen no hace más que anunciar su caída. Por ello todos los politiqueros adornan sus acciones con palabras de bienestar de la mayoría, por eso hay que analizar con detenimiento lo que pretenden vender, decir o hacer en nombre de la mayoría y preguntarse si realmente ese tipo de acciones afecta negativamente a la política. 

 La importancia de la política es parte fundamental del ser humano puesto que somos parte de una sociedad, de una comunidad y, por lo tanto, no podemos desentendernos de los otros. Es más, dependemos unos de otros. Por tal motivo, hay que lograr una sociedad que permita la consecución del bienestar colectivo y no el bienestar de unos pocos. La política es una actividad humana inherente a todo ser humano, el filósofo griego Aristóteles sostiene que el hombre es un animal político. No hay acto humano que no tenga consecuencias ya que ineludiblemente afecta a otros, así que no existen actos neutrales. Vivir en una comunidad implica resolver problemas que afectan a esa comunidad y cuando se participa activamente en la solución de problemas que se le presentan a esa comunidad se está haciendo política por ello la importancia de participar en fortalecer la política.

El ser humano necesitado, es un ser que no puede vivir sólo. La felicidad de sentirse acompañado es parte de su esencia y esto lo convierte en un ser social. Pero para vivir en armonía, plenitud humana y alcanzar las metas que se plantea con las personas con las que convive es necesaria una herramienta, una estructura que sostenga la comunidad, le dé dirección y la fortalezca y es ahí cuando la vida se convierte en política. “Hacer política es hacer pasión” comenta la maestra en filosofía por la Universidad Panamericana, Monserrat Salomón. Pasión de buscar el bien, de conocer la sociedad, llegarla a amar para luchar por ella, es patriotismo, dedicación, corresponsabilidad, dar lo mejor de sí, la política es parte fundamental del ser humano.

Para ello no hay que caer en la trampa y canto de sirenas, hay que tener mucho cuidado con quienes dirigen la opinión pública o discuten sobre todo tipo de temas políticos encubiertos con el manto de la imparcialidad y de la verdad sobre las cosas o los hechos. Hay muchos que se dicen ser neutrales u objetivos, como que están por encima de las ideologías y de los intereses, pero lo que pasa es que cada uno tiene sus sesgos y muchas veces tuercen el análisis político en función de ciertos grupos y partidos. Frente a esta realidad en las próximas elecciones o nos resignamos que nuestra provincia se hunda en la pobreza y marginación…o hacemos de Loja una provincia con dignidad de pueblo y amor a la tierra que nos vio nacer, usted tiene la palabra. Así sea.