
En el barrio Nueva Esperanza del cantón Catamayo, la señora Arely Sarango, desde hace 31 años, labora en el faenamiento y venta de carne de asno. El comercio de este producto se puede encontrar en el mercado central de la ciudad.
Este animal (burro) es criado con el objetivo de obtener su carne para consumo, ya que, presuntamente, ayuda al mejoramiento de algunas enfermedades (como asma o para personas que tienen falta de energía), es decir, es “medicina” para el ser humano.
Para proceder con el sacrificio del animal se requiere de un proceso ordenado sanitariamente.
El faenamiento está costando USD 300 y el valor de la carne alcanza los USD 3 dólares por libra; por lo que sí se generan ganancias. (I)