
Nuevamente este fin de semana, los pequeños productores y vendedores informales a pesar de las restricciones se tomaron las vías para efectuar la tradicional feria libre en el sector La Tebaida, mientras tanto el Municipio de Loja no da solución y más bien cierra los lugares destinados para este fin.
Situación
Han pasado más de 7 meses desde que inició la pandemia de la COVID-19 y con ello la prohibición de efectuar las ferias libres por considerarse foco de contagios debido a la concentración masiva de ciudadanos. Sin embargo, la ciudadanía desde semanas atrás viene solicitando la apertura de estas actividades con todos los protocolos de bioseguridad, pero no ha sido escuchada por las autoridades respectivas.
La Municipalidad como medida para que no se efectúe la feria de La Tebaida, puso tanqueros, vallas y plataformas en los lugares destinados para este fin, pero la gente al no poder utilizar este sitio este fin de semana se vio obligada a tomarse las calles.
Maribel Cajamarca es una de las vendedoras. Señaló que ellos se amanecieron cuidando en la calle un puesto de venta debido a que esa actividad es el único sustento que tienen y no han laborado más de 7 meses.
Han hecho todos los trámites correspondientes ante el Ayuntamiento local, entre estos el plan para la aplicación de los protocolos de bioseguridad que les permita su apertura, pero no tienen respuestas.
Manuel Calvache, también vendedor, mencionó que la pobreza ha aumentado en los hogares de Loja y un claro ejemplo, es su caso donde viven al diario con las ventas de él y su esposa.
“Discotecas y bares estarían a punto de abrirse con el permiso de las autoridades, es decir, el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Cantonal está analizando el tema, mientras que a las ferias libres las quieren terminar para siempre, cuando muchos lojanos dependemos de ellas para subsistir porque es nuestra forma de ganarnos la vida”, dijo.
Los quieren enviar en las cercanías de la Universidad Nacional de Loja, “allí quien nos va a comprar, cuando en La Tebaida llevamos trabajando más de 30 años y todo mundo conoce el lugar”, destacó Carmen Delgado.
Agregó que van a continuar hasta que les dejen en sus puestos y si tiene que derramar sangre o ir a la cárcel por defender el trabajo, lo harán.(I).(FJC).