La nueva realidad resulta más costosa para los negocios

Insumos de bioseguridad colocados al ingreso de los negocios para evitar contagios de COVID-19.

Con la autorización de las actividades varios negocios abrieron sus puertas, para ello, tuvieron que realizar gastos para implementar los protocolos de bioseguridad. Propietarios señalan que mantenerse en esas condiciones les genera recursos extras que no los tienen.

Circunstancias

El Ministerio de Trabajo indicó en unas de sus cláusulas que las medidas de prevención en sus trabajadores deben ser asumidas por los empleadores. Por ejemplo, si decide hacer las pruebas para determinar la COVID-19, el costo de estas deberá ser asumido por parte del propietario del negocio.

Para Ximena Torres, propietaria de un almacén de zapatos, la denominada “nueva normalidad” les ha traído gastos extras. “En mi caso para reabrir el local instalé un dispositivo de rociado al ingreso, seguido de un pediluvio y desinfectante con una inversión de USD 100”.

Indicó que hasta el momento no ha podido recuperar lo invertido, sin embargo, continúa gastando porque el sistema es de rociar todos los días y tiene que colocarle desinfectante y agua, lo cual si la situación continúa podría llevarlos a la quiebra.

Cifras

Cumplir el protocolo no ha sido un asunto fácil en negocios, por la inversión en insumos y utensilios para procedimientos de limpieza, desinfección y sanitización. Es una nueva realidad mucho más costosa para las empresas.

En estos sectores se habla de gastos que van desde los USD 50 hasta los USD 500, por más pequeñas que sean los negocios, locales o empresas.

Por ejemplo, el restaurante de Marcela Medina, tiene 5 mesas y dispone para unas 20 personas. Ella colocó pediluvios, desinfectantes y una cámara de ozono para limpiar el ambiente con una inversión de USD 200, aunque las ventas han sido moderadas, el mantenimiento de los insumos de bioseguridad le genera gastos adicionales y al momento no ve ganancia alguna.

Cree que las entidades del Estado deberían darles la oportunidad de recuperar los recursos y luego de un tiempo empezar a cobrar las contribuciones, ya que los negocios recién están abriéndose. También que los bancos sean más sensibles en el cobro de las cuotas y den prórrogas. (I).(FJC).