Retorno a clases


Unicef en Ecuador, a propósito de celebrar el día del niño, exhortó al gobierno nacional a reabrir los centros educativos, combatir la desnutrición y violencia. “Hacemos un llamado urgente para proteger el presente y futuro de la niñez”, manifestó a la agencia de prensa EFE, Joaquín Gonzales, representante en Ecuador.

El pedido se fundamenta en reveladoras cifras, sin duda alarmantes:

1.En educación: En el contexto de la pandemia y su consecuente cierre de las instituciones educativas afectan a “4,4 millones de estudiantes”, en su proceso de aprendizaje, y lo más grave, “al menos 90.000 niños abandonaron el sistema educativo en el 2020”.

2.En salud: “1 de cada 3 niños menores de 2 años sufren desnutrición crónica infantil, agudizada por la falta de agua segura, saneamiento, higiene, condiciones de vivienda, vacunación de rutina y controles médicos”.

3.Respecto a embarazos de niñas y adolescentes, según cifras del 2018, “cada día 148 adolescentes tuvieron un hijo, e incluso 6 niñas de entre 10 y 14 años de edad también fueron madres”.

4.Respecto a violencia intrafamiliar insta a fortalecer e impulsar prácticas de “crianzas libres de violencia y el cuidado mental para los padres de familia y niños”.

El llamado del organismo internacional debe poner al Estado y sus gobiernos nacional y locales a repensar planes de trabajo que prioricen, protejan y garanticen “el bien superior de los niños, niñas y adolescentes”. Significa, por tanto, modificar las estructuras del modelo de vida que por años privilegiaron el desarrollo y progreso económico y material, sobre la vida y dignidad humana. Descuidaron objetivos de los planes decenales de educación, de objetivos del desarrollo del milenio y de principios constitucionales que exigen recursos económicos, en el campo de la educación, hasta el 6% del Producto Interno Bruto (PIB).Completamente de acuerdo que es un imperativo reabrir los centros educativos, aunque es necesario aclarar, que muchos directivos y docentes jamás las cerraron y jugándose su propia vida, acudían organizadamente a su institución a recibir a niños y padres de familia que carecen de servicios de internet y de recursos tecnológicos para compartir sus enseñanzas, desarrollar actividades de los proyectos interdisciplinares, entregar los textos escolares y la colación escolar.

Reabrir, por supuesto que sí, los docentes estamos convencidos que la educación en línea no sustituye al acompañamiento presencial, ni las relaciones entre niños son iguales desde un computador, que su compartir en el aula y la recreación, de allí la necesidad imperiosa de un fortalecimiento emocional en la familia.

Reabrir sí, de forma progresiva y voluntaria garantizando a la comunidad educativa implementos de bioseguridad oportunamente, servicios de internet de calidad, equipamiento tecnológico y mejoramiento de la infraestructura; revalorización docente, empezando por dar cumplimiento a la LOEI reformada en el mes abril, la capacitación y el salto en el uso de las TIC viabilizará un retorno progresivo, seguro y una planificación para trabajar en forma presencial y virtual.