
Desde que inició la pandemia se tuvo que cerrar las paradas de la ruta troncal del Sistema Integrado de Transporte Urbano (SITU). No existen los recursos para la contratación del personal, ni la tecnología para habilitarlas, según informó el dirigente del Consorcio de Transportistas Urbanos.
Hasta los primeros meses de 2020, las paradas estuvieron operativas. Sin embargo, tras el confinamiento, luego con limitación de aforo en la transportación y el uso obligatorio de la tarjeta electrónica, las estaciones quedaron abandonadas.
El presidente del Consorcio de Transportistas de Loja, Diego Guerreo Ordóñez, explica que las paradas dependen del Municipio de Loja, pero la organización que representa, maneja equipos y personal.
En la actualidad no existen los fondos para habilitarlas. Los equipos están obsoletos. “Hay que cambiar la tecnología, proceso de transmisión de datos y contratación del personal que brinde la atención”, refiere.
Habilitadas
Temporalmente está abierta de forma parcial, la parada de la 10 de Agosto, que va desde norte-sur y sur-norte, desde las 07h00 a 19h00, de lunes a domingo; funciona con equipos básicos.
Guerrero Ordóñez precisa que, con el pasaje actual de USD 0.30, no se puede dar mantenimiento a las unidades, tampoco reabrir las 20 estaciones restantes.
Por ello, se han efectuado varios planteamientos al Ayuntamiento local, para una revisión de la tarifa de transportación. En marzo próximo se espera una respuesta para poder abrir el resto de infraestructura.
Instalar
Una vez que se habiliten las paradas se deberán instalar los validadores (contadores de pasajeros), el ciudadano antes de subir al bus deberá pasar o hacer uso de su tarjeta electrónica, actualmente se lo hace en los dispositivos ubicados en cada unidad.
Otra de las ventajas del funcionamiento de las estaciones, es el sistema de transferencia, por ejemplo, en la avenida Manuel Agustín y Mercadillo existe la integración tarifaria.
Los moradores de barrios occidentales que se movilizan en las líneas 8 y 11, pueden hacer el cambio de los autobuses para ir a sus lugares con el mismo pasaje.
“Esta es una ventaja para el usuario, pero a nosotros no nos beneficia porque apenas se cobra USD 0.30”, precisa el dirigente.
Inconvenientes
Los usuarios consideran que es importante que todas las estaciones funcionen, para mayor seguridad.
“Así no estamos expuestos al peligro en las veredas esperando el bus. Además, nos protegen de las inclemencias del tiempo”, dice Yolanda Abendaño Matamoros, quien a diario usa el servicio de transporte público. (I).
Dato
60 trabajadores se requieren para reabrir las 20 paradas de la ruta troncal.